[Las innovaciones tecnológicas nos permiten llegar más lejos cada día y en todos los aspectos, como el de la construcción. Con la llegada de las impresoras en 3D se abrió una brecha de creatividad en proyectos de todo tipo.
En el caso de la construcción, las impresoras 3D de tamaño más grande, por decirlo de algún modo, son capaces de imprimir edificios, viviendas y paneles para su uso en este sector.
Así, una empresa rusa -Apis Cor-, se dio a la tarea de imprimir una vivienda de 38m2, en tan solo 24 horas y, aunque sí cuenta con partes prefabricadas, la impresora se puede transportar al lugar en cuestión, en donde imprime capas de cemento que están reforzadas manualmente con varillas.
Para hacerlo aún más innovador, el diseño es circular, lo cual demuestra las infinitas posibilidades de estas impresoras. En 24 horas ya estaba lista la construcción, solo a la espera de pintura y decoración, lo cual también se hizo en tiempo récord.
Esta solo era una prueba, pues con ella pudieron sacar notas de qué era en lo que se tenía que mejorar, como ejemplo, están los factores de temperatura: hubo que mantener el ambiente a 5° para evitar que el hormigón se congelara. Ahora buscan la utilización de geopolímeros que sean resistentes a cualquier temperatura, sea fría o caliente.
Al final, el costo por metro cuadrado de construcción fue de $275 dólares (en esta estructura redonda), mientras que, en casos de construcciones rectangulares, puede llegar hasta a $223. La empresa Apis Cor señala el ahorro de hasta el 70% respecto a una construcción tradicional.
No cabe duda de que los avances tecnológicos suceden cada día y, aplicándolos al servicio de la sociedad, pueden impulsar un gran desarrollo en el sector de la construcción…y en todos los demás.